El preparador Predator ha realizado esta estratosférica preparación del Cadillac CTS-V.
El motor base es un 7.0 V8 de un Corvette C5R, al que se le ha añadido un sistema de doble turbo con el que alcanza la potencia máxima a 6.400 rpm, con la que rinde 816 cv de potencia. Todo el complejo mecánico ha sido adaptado a este aumento de potencia tan importante. Los escapes, la admisión, refrigeración, transmisión y demás elementos mecánicos son totalmente nuevos. Para agarrarse al asfalto utiliza unos enormes neumáticos Michelin de medida 285/35ZR19 delante y 305/30ZR19 detrás.
Fuente: diariomotor.com
No hay comentarios:
Publicar un comentario